La palabra “Akashicos” deriva del sanscrito “Akasha” y significa “energía cósmica” o “espacio”. Representa el éter que impregna todo el universo.

Los registros Akasicos son como un recuerdo de la existencia, un “lugar” donde se almacenan todas nuestras experiencias de vidas pasadas. Este sistema energético contiene todas las posibilidades que el alma tiene para evolucionar. Los registros Akashicos existen sea para el plano personal que para el plano planetario y universal, con diferentes frecuencias vibracionales.

Hay una conexión entre el micro y macrocosmo, el universo, el mundo y nosotros los seres humanos. Esto significa que cada una de nuestras acciones afecta directa o indirectamente los demás. Esto nos lleva a reflexionar sobre las responsabilidades y infinitas posibilidades que tenemos.

Conectarnos a los registros Akashicos nos permite entender porque estamos aquí, la contribución única que podemos dar en este plano físico y porque pasan ciertas cosas.

Todo lo que hacemos, todos aprendizajes, evolución, gesto de amor, pensamientos, emociones, todo deja una huella energética que queda registrada (nada queda afuera). Inclusive cuando nadie reconoce el valor de nuestras acciones, en el plano superior esto pasa de todo modo.